Una preciosa boda rodeada de montañas con multitud de ambientes.
Tras la original ceremonia a caballo, los invitados pasaron al aperitivo. Steak tartar, salmonetes, vierias o pulpo fueron algunos de los aperitivos escogidos junto a los bufets de jamón, quesos, crudités y Sushi.
La comida siguió en una carpa debido a las altas temperaturas y el menú escogido fue un éxito. Bailaron hasta que se puso el sol!!
Las flores fueron a cargo de nuestra amiga Laly Fontanals (niflauers) y el material escogido de Abanik.
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